II EEC

 

EL ANTIGUO EGIPTO, UNA SOCIEDAD DE CORTE “MODERNO” MILES DE AÑOS ATRAS

  • ESCUELA DEL KAP, PROTOTIPO DE LA EDUCACION MIXTA

FELIPE MANCHÓN/ IRENE MONMENEU/ BEATRIZ SOLER

La defensa de la educación mixta, y el papel social de la mujer polarizan hoy el interés de los medios, al  ser temas de candente actualidad. Pero no es algo nuevo, en el Antiguo Egipto también eran asuntos no de debate, si no de aplicación social. Miles de años atrás, miembros apreciados del harén, se formaban  en la escuela del kap, una idea precursora de la educación mixta, en la que niños y niñas recibían la educación por igual. La sociedad egipcia encierra usos y costumbres muy distintos de los de la cultura grecorromana, en la que la mujer tenía un rol absolutamente secundario. En el Antiguo Egipto la las mujeres tenían ciertos derechos, “herencia de la matrilinealidad africana”. Estos aspectos del Egipto que nos fascina fueron abordados en II Encuentro de Egiptología Complutense, celebrado los días 16 y 17 de abril en la UCM.

II Encuentro Egiptología Complutense. Vídeo: Aida Lorente

El año pasado, coincidiendo con el quinto aniversario de su fundación, el grupo de Egiptología Complutense, fundado en la facultad de Geografía e Historia y presidido por el profesor José Ramón Pérez-Accino, organizó el I Encuentro de Egiptología Complutense, un congreso que tuvo mucho éxito, y que combinó visiones clásicas y novedosas del fenómeno de la egiptología. Un año después, el II Encuentro de Egiptología Complutenseha buscado repetir la fórmula del éxito.

El cartel del encuentro ha combinado el trabajo de profesionales reputados del mundo de la historia antigua con jóvenes promesas que van sacando adelante sus tesis sobre temas variados. El éxito de la pasada edición provocó que el número de inscripciones aumentase exponencialmente de un año a otro. Esto se debe a que el mundo de la egiptología, de las pirámides, de las momias y de la grandeza del imperio faraónico sigue generando una enorme fascinación. Las diferentes variables puestas sobre la mesa por los ponentes de este congreso aumentan el misterio y el interés.

“Cada vez más gente interesada en la egiptología”

El pistoletazo de salida del II Encuentro de Egiptología Complutense, organizado por el profesor José Ramón Pérez-Accino, se produjo en un escenario de excepción, el salón de actos de la facultad de Geografía e Historia de la UCM. En la mesa inaugural, se sentaron veteranos, como el delegado cultural de la embajada de Egipto y director del Instituto Egipcio Basem Saleh Daoud o el propio Pérez-Accino, y noveles, como el decano de la facultad, Miguel Luque, elegido recientemente para el puesto, y Gonzalo Bravo, director del nuevo departamento de Prehistoria, Historia Antigua y Arqueología, resultado de la fusión departamental puesta en marcha por el equipo rectoral dirigido por Carlos Andradas.

El decano fue dando la palabra a los diferentes miembros de la mesa inaugural. El primero en intervenir fue Basem Saleh Daoud, que recordó que él fue alumno de esa universidad en sus estudios de posgrado, y alabó la importancia de la colaboración del gobierno egipcio con el grupo de Egiptología Complutense. “Hay cada vez más gente que está interesada en la egiptología, y eso es muy bueno” defendió Daoud, que se refirió también a la próxima fundación de un museo de Egipto que supondrá un salto cualitativo en el número de objetos disponibles y su calidad, y a un congreso universitario sobre egiptología que se celebrará a final de año.

                La mesa inaugural del II Encuentro de Egiptología Complutense (FOTO: Clara Molina)

Seguidamente, Gonzalo Bravo reconoció la influencia que los estudios egiptólogos tienen sobre su departamento, que reivindicó como “el segundo departamento en todo en esta facultad”, recordando que, en 2017, 13 de los doctorandos que leyeron una tesis en la facultad procedían de este departamento. El director dijo sentirse muy halagado y satisfecho de que se le hubiese invitado a participar, y mostró su esperanza de que, a partir de eventos como este, puedan surgir nuevas formas de docencia y de universidad.

El papel crucial de los doctorandos

Por su parte, José Ramón Pérez-Accino, director del grupo de Egiptología Complutense, quiso reseñar el fundamental papel que los alumnos que están preparando su tesis han tenido en la organización de estas jornadas. “Este ha sido un año de éxitos” sostuvo Pérez-Accino, que recordó el proyecto de investigación en la que el grupo ha participado en el Valle de las Momias Reales, y que mostró su voluntad de que este encuentro pueda celebrarse muchos años más.

Cerró el acto de inauguración Miguel Luque, que, como decano de la facultad de Geografía e Historia, mostró su satisfacción por la celebración del encuentro de egiptología dentro de la facultad, y que quiso recordar que los índices mundiales universitarios colocan a este centro entre los 50 mejores para estudiar carreras de humanidades. El decano definió al grupo de Egiptología Complutense como “uno de los puntales de la facultad”.

El acto de inauguración terminó con una pequeña sorpresa, la entrega de la condecoración de la mosca de oro al valor, una antigua insignia egipcia de tipo militar, que fue concedida por los doctorandos a los profesores Carmen Pérez Die, exdirectora del Museo Arqueológico Nacional, y Jesús Urruela, docente de la UCM. El tercer galardonado fue el doctor Basem Saleh Daoud, que dejará próximamente sus actuales responsabilidades, y que fue reconocido por José Ramón Pérez-Accino por su colaboración durante todos estos años.

Los hijos del kap

El congreso se trasladó a otra aula en la propia facultad, en la que se produjeron las charlas. Tras el descanso, la primera en intervenir fue Emma Perazzonne. El director del congreso informó de que la ponente no había podido asistir, y que su intervención, “¿El poder tras el poder? Las mujeres de la corte egipcia”, estaba pregrabada. Perazzonne, que ya intervino el año pasado, abordó en su intervención la figura del harén egipcio, la influencia de las mujeres en el Antiguo Egipto, y habló de la escuela del kap, donde se educaba a los hijos de los nobles.

“El harén es un fenómeno cultural muy concreto, que se produce únicamente en las esferas oriental e islámica” explicó Perazzonne, que siguió detallando elementos al respecto, destacando el harén indio, el otomano y el chino como ejemplos de esta práctica. Sin embargo, la ponente quiso desmentir la idea generalizada de que solamente las mujeres formaban parte de ellos, y explicó que mujeres, servidores y guardias formaban parte de este grupo que no era prohibitivo, y que ofrecía derechos a sus miembros, a los que, en algunos casos, se otorgaban tierras en propiedad a su nombre.

Algunos miembros apreciados del harén podían disfrutar de uno de los principales privilegios de los niños en el antiguo Egipto, ser formados en la escuela del kap, en la que estudiaban los hijos de los nobles, notablemente del faraón. Perazzonne quiso extenderse en la explicación de lo que significaba esta educación, “una educación mixta en la que todos recibían la educación por igual”, y se apoyó para su explicación en diversos textos escritos por autores como Judith Butler, John Stuart Mill, Catherine Macaulay o Mary Wollstonecraft acerca del género y la igualdad entre hombres y mujeres.

La escuela del kap era ante todo una idea precursora de la educación mixta, y de ella, podían derivar matrimonios diplomáticos o interdinásticos que generaban lazos recíprocos y fraternidad entre reyes. Para Perazzonne, las mujeres que formaban parte de los harenes podían llegar a tener un gran poder real en la corte, del cual podían beneficiarse ellas y miembros de sus familias, algunos incluso de manera hereditaria.

Un enfoque nuevo de las sítulas

Una sítula es un recipiente para realizar libaciones, y está relacionada con diosas y cultos. Sin embargo, sus aplicaciones pueden ser diferentes. En su intervención “Las sítulas amuleto”, la investigadora Raquel Garrido, que ha dedicado una buena parte de su trabajo a investigar estos elementos, quiso iluminar al público con una visión diferente al respecto, y sobre su aplicación como amuleto, en el sentido de alejar el mal o proporcionar el bien, y su aspecto simbólico.

Las sítulas amuleto, explicó Garrido, tienen un pequeño tamaño, y van pegadas al cuerpo. Muy pocas han sobrevivido al paso del tiempo, y las que están se encuentran en museos, en colecciones privadas o incluso en el mercado negro. El material que se utilizaba para su construcción era generalmente la fayenza y el bronce, aunque también se podían usar otros, como el lapislázuli. La tipología general de las sítulas respeta su función inicial para las libaciones, llevando incluso asa. Sin embargo, algunas empezaron a presentarse sin asa, lo que favorecía que se pudiesen llevar pegadas al cuerpo.

En cuanto a la iconografía que estas sítulas presentaban, la ponente especificó que muchas de ellas presentan la escena del amamantamiento del rey, en la que una diosa vierte agua desde el sicomoro sobre el difunto y sobre el ba, su alma. Sin embargo, en muchas de las imágenes reproducidas en estas sítulas, el difunto no es el rey, lo que implica que, según la iconografía egipcia, una diosa nunca lo amamantaría. Raquel Garrido finalizó su intervención señalando que estas sítulas tienen una doble función, el refuerzo para garantizar el alimento y el renacimiento del difunto en la otra vida, por un lado, y por otro, alimentar el ba del difunto para contribuir a que no se aleje de la tumba, y por tanto, del difunto.

Derechos, pero no privilegios de las mujeres egipcias

La última ponencia de la mañana corrió a cargo de Jesús Urruela, uno de los mayores expertos españoles en historia antigua. El título de su intervención fue “Mujer y estatuto de dependencia”. Urruela comenzó su intervención señalando que no existía igualdad entre hombres, pero que sí había mucha diferencia con el papel de la mujer en la sociedad griega y romana, que era absolutamente secundario. “Las mujeres tenían ciertos derechos, pero no puede hablarse de privilegios. Es una herencia de la matrilinealidad africana” señaló el profesor galardonado con la mosca de oro.

Urruela hizo un repaso de las diferentes funciones que las mujeres habían tenido en el Antiguo Egipto, desde las mujeres de la alta sociedad, que gozaban de privilegios significativos, hasta la figura de la madre, básica en la cultura del país en la antigüedad, pasando por supuesto por la memoria de algunas faraonas importantes, como Hatshepsut, que reinó en Egipto durante 20 años, y que fue la primera emperatriz que gobernó sin ser consorte.

Sin embargo, el profesor también contó lo que ocurría cuando una mujer era adúltera. “El hermano mayor le entregaba la mujer al rey para que la castigase. Era quemada viva y los restos eran esparcidos” evocó. Urruela quiso insistir en la idea de que el rol de las mujeres era variado en el antiguo Egipto, pero que todas tenían un papel primordial dentro del orden social egipcio.

Tras el descanso, tres mujeres pronunciaron varias charlas, cuya temática varió desde la imagen del enemigo extranjero en la XVIII Dinastía hasta la expresión de la muerte en la época ptolemaica, pasando por una charla pronunciada por María Luisa López, que estudió la simbología de las piedras sagradas de Egipto, y el mensaje que estas traen. Las charlas del lunes 16 finalizaron con una charla del profesor de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Francisco Borrego, que habló sobre el mito del nacimiento divino del soberano a principios de la dinastía IV.

Historia de una diosa egipcia

Las mesas se reanudaron el martes, con conferencias pronunciadas por doctorandos como Nerea Tarancón y Laura García Jiménez y por figuras de referencia de la arqueología y la egiptología, como Miguel Ángel Elvira Barba, profesor de la UCM y exdirector del Museo Arqueológico Nacional, que hizo referencia en su ponencia al retrato ptolemaico. A lo largo de la mañana, se trataron otros temas, como el discurso del general Megido en las fuentes egipcias, y el protagonismo de la navegación en la formación de la identidad cultural en el antiguo Egipto.

Tras el descanso, Adelaida Oliver realizó una conferencia llamada “Neftis. Acción y significado de una diosa egipcia”, que extrajo de su recientemente presentado trabajo de fin de máster. Oliver quiso analizar la figura de Neftis, una divinidad con un papel más destacado del que siempre se ha señalado en la historia del Antiguo Egipto, en la que era representada como una divinidad menor a la sombra de Isis, su hermana. En su intervención, la ponente realizó una aproximación de la diosa, tratando desde una perspectiva general los detalles más concretos de la divinidad egipcia con la finalidad de datarla de mayor “renombre”.  

Etimológicamente, Neftis significa señora de la casa o de la tierra en griego. Oliver explicó que esta diosa se relacionó  con ciertas divinidades que tuvieron importancia con el mundo de la fertilidad, tales como Anukis, Mut, Meskhenet y Maat, a pesar de que Neftis fuera infértil. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la sociedad de la época era rural y la fertilidad del campo era la forma de subsistencia, motivo por el cual los agricultores veneraban a las diosas fértiles. Por ello, reconoció la ponente, sigue resultando complejo entender por qué también alababan a Neftis si ella no podía concebir.

Dualismo entre diosas, Isis y Neftis

Neftis siempre estuvo a la sombra de Isis, su hermana y cuñada al mismo tiempo. Isis, una de las figuras más emblemáticas del Antiguo Egipto, era representada como el arquetipo de esposa y madre que parecía encarnar todo lo bueno. Todo lo contrario ocurría con Neftis, ya que no tenía ni aparato reproductor ni útero.

Sin embargo, Adelaida Oliver reivindicó la imagen de Neftis como una diosa protectora que simbolizaba la experiencia de la muerte y que ayudaba a llevar gente a la otra vida. Isis, por su parte, representaba la práctica de volver a nacer, lo que suponía una diferencia más entre las dos hermanas.

Por otro lado, Neftis se caracterizaba por ser una diosa protectora que simbolizaba la experiencia de la muerte y que ayudaba a llevar gente a la otra vida, mientras que Isis representaba la práctica de volver a nacer. Una diferencia más entre las hermanas. Asimismo, Neftis tenía una presencia destacada en los textos de las pirámides, lo que explica su función como diosa funeraria, pues normalmente aparecía con forma alada, una de las representaciones clásicas de la protección a los difuntos.

Egipto, el imperio de la cohabitación

La segunda jornada, a su vez, se vio marcada por las reflexiones del profesor de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), Antonio Pérez Largacha, quien ya intervino el año pasado. Largacha habló sobre la política exterior de Egipto en el Reino Nuevo, con emperadores como Hatshepsut, Tutankamón, Akenatón o Ramsés II, algunos de los más célebres de la historia del Antiguo Egipto.

El ponente propuso una versión diferente al respecto, queriendo alejarse del punto de vista “egiptocéntrico”. Para Pérez Largacha, algunas representaciones presentan a Egipto como un imperio exagerado. Sin embargo, el profesor defendió que los sucesivos faraones mantuvieron una relación de convivencia con los imperios vecinos, como Babilonia o Canaán, en materia de administración y redes comerciales, llegándose a un escenario de cohabitación muy positivo para todos.

Por la tarde, Laura di Nóbile, del centro ELBA, hizo referencia a las minas egipcias como principal recurso en la búsqueda de oro, un material muy preciado en el Antiguo Egipto que se utilizaba en los enterramientos reales, mientras que Cruz Fernanz Yagüe, coordinadora del encuentro y la primera persona que leyó una tesis sobre egiptología, realizó una conferencia sobre el escriba Butehamon, que tuvo un enterramiento grandioso, y cuya tumba se encuentra hoy expuesta en un museo de Turín.

 

LA EGIPTOLOGÍA SE ABRE PASO EN LAS AULAS

El II Encuentro de Egiptología Complutense fue el escenario en el que Pérez-Accino informó detalladamente sobre “el reflejo académico del proyecto de Egiptología”: el Título Propio Complutense de Especialista en Orientalística y Egiptología, una oferta de enseñanza superior única en España.

Según Pérez-Accino, la Complutense tiene un arsenal “tremendo” de especialistas de primer orden internacional en el mundo de la orientalística, y es por ello que tomaron la decisión de desarrollar el título propio, que “ofrece una formación altamente especializada en materias y disciplinas relacionadas con las lenguas, cultura e historia de las civilizaciones del Próximo Oriente antiguo y Egipto”. En este sentido, el plan de estudios cuenta con un elenco de profesores de la talla de Miguel Angel Elvira, Alberto Bernabé, Mariano Torres, Juan Antonio Álvarez-Pedrosa,  Pablo Torijano, Ignacio Márquez o Andrés Piquer; todos ellos docentes especialistas en la materia que imparten.

El Título Propio Complutense de Especialista en Orientalística y Egiptología se trata de una clase de estudios superiores de posgrado que ofrece la UCM, que no es un título oficial equiparable a un máster sino un “reconocimiento” de la universidad. Por este motivo, no ofrece al alumno acceso al Doctorado salvo en determinadas ocasiones. A 40 horas de diferencia del plan de estudios de un máster oficial, la principal de sus ventajas es el coste económico, considerablemente inferior. Además, admite alumnos oyentes en módulos individuales.