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Madrid, 17 de febrero de 2022

Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, estalla ante las acusaciones de la izquierda por la supuesta contratación por parte de la dirección del propio Partido Popular para investigar los negocios en el sector sanitario del su hermano, Tomás Ayuso. “Les animo a que traigan una sola prueba.”, ha afirmado Díaz Ayuso durante la sesión plenaria de la Asamblea de Madrid.

Desde el PSOE, Unidas Podemos, Más Madrid han llovido críticas a Ayuso. Juan Lobato, el portavoz del grupo socialista de la Comunidad de Madrid, ha exigido a la presidenta que “comparezca ante esta cámara, que ponga en marcha una comisión de investigación y que dé traslado a la Fiscalía de toda la información importante”. “Lo que quieren tapar, no lo van a tapar”, ha sentenciado Lobato.

Unidas Podemos, a través de su portavoz Carolina Alonso, también ha asaltado contra Ayuso y ha criticado que la presidenta esté “mucho más preocupada por tomar el poder en el saco de gatos en el que se ha convertido el Partido Popular que de gestionar la región”. Ha calificado el partido dirigido por Pablo Casado como “mafia siciliana” y ha pedido a la presidenta de la comunidad que “no impida” la investigación de los contratos a sus familiares y amigos.

El socio de gobierno, Vox, no ha tratado el tema y ha vuelto a exigir responsabilidad a Ayuso en materia de seguridad ciudadana en la Comunidad de Madrid. La presidenta ha recordado que “no tiene competencias en materias de seguridad ni de inmigración” y ha pedido que dejen de “criminalizar la inmigración”.

CRISIS EN EL PARTIDO POPULAR

El Partido Popular ha entrado en crisis interna tras la filtración de que el partido político supuestamente hubiera contratado a un detective para investigar a Tomás Ayuso, hermano de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Esta investigación que sostiene la dirección nacional del PP se ha producido por informaciones, a las que da “veracidad” pero que carece de documentación para demostrarlo, del “posible cobro de una comisión por intermediar en un contrato público” de 1,5 millones de euros, adjudicado por el trámite de emergencia y sin ir a concurso, a una empresa que suministró mascarillas a la Consejería de Sanidad.

Ayuso, ante el estallido de esta noticia, acusa a la dirección de su partido de haber actuado de manera “cruel” contra ella y su gobierno. “Es muy doloroso que dirigentes de tu partido, en lugar de respaldarte, sean quienes te quieren destruir”, ha afirmado Ayuso durante la rueda de prensa celebrada tras la sesión plenaria de la Asamblea.

“No tendrán ni una sola prueba de corrupción por mi parte”, ha defendido la presidenta y ha animado a que se demuestre que ha intermediado para “beneficiarle a él o a alguien de mi entorno personal”.

Además, la presidenta denomina este ataque como “insensato” y acusa a la dirección nacional del Partido Popular de querer “perjudicarla políticamente” por querer presentarse al Congreso por el PP de Madrid.